Hola, soy Beatriz y tengo 53 años.
Este es un dato importante ya que es una de las causas por las que acudí a pedir ayuda a Nerea. Yo no había tenido problemas de peso hasta que empecé con la menopausia. Aunque hacía ejercicio regularmente y cuidaba mucho mi alimentación, poco a poco iba cogiendo kilos y por mucho que lo intentaba no había forma de perderlos. Y los kilos no eran músculo, eran grasa.
No me reconocía en el espejo. En la primera consulta, Nerea detectó otro problema importante que también había que abordar. Tengo una hernia de hiato y llevaba con tratamiento de Omeprazol casi catorce años, lo que me podía acarrear efectos secundarios importantes en mi salud. Mis digestiones no eran buenas, me sentía pesada e hinchada, incluso comiendo alimentos muy ligeros. Cada vez que había algún cambio en mi alimentación por viajes, vacaciones.... tenía que aumentar la dosis de Omeprazol para paliar los efectos de estos cambios.
Nerea me planteó un doble propósito, el primero, mejorar mis digestiones, ya que algunos alimentos potencian los efectos de la hernia, y a largo plazo, el propósito era cambiar mi composición corporal, perdiendo la grasa que me sobraba. Y nos pusimos manos a la obra. Poco a poco empecé a perder grasa, pero al intentar bajar las dosis del Omeprazol, empecé con reflujo gástrico, de nuevo. Conmigo, no funcionaron las pautas que ella solía aplicar, pero lejos de tirar la toalla, estudió mi caso más en profundidad y fue haciendo más adaptaciones en la dieta. Y ha funcionado!!!!
Hace casi 5 meses que no tomo medicación, mis digestiones son perfectas, no tengo ninguna molestia e incluso como alimentos que antes me sentaban fatal. He vuelto a disfrutar de la comida. Todavía no ha terminado el proceso, pero vamos por muy buen camino. Y además, mi cuerpo es otro, ha cambiado mi composición corporal, he perdido los kilos de grasa que me sobraban. He vuelto a ser yo, y no ha habido efecto rebote. Nerea me está enseñando a alimentarme y a cuidar mi salud de forma consciente y ha hecho que me sienta muy bien, tanto por dentro, como por fuera. Y, lo más importante, le debo mi salud futura, ya que de haber seguido como hasta ahora podría haber tenido muchos problemas. Es una gran profesional. Estoy encantada de haber acudido a pedirle ayuda, lo que me arrepiento es de no haberlo hecho antes.
Mucha gracias, Nerea.
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