Dentro de las dietas para favorecer la pérdida de grasa está la llamada dieta paleo, también conocida como “Dieta del hombre de las cavernas”, y que ha ido ganando en popularidad en los últimos años. En concreto, se hizo conocida en la década de los 2000, cuando se publicó el libro “The Paleo Diet”, del doctor nortemericano Loren Cordain, y que propone una vuelta al consumo de alimentos que nuestros antepasados cazadores-recolectores habrían comido hace miles de años.
Si bien no estamos hablando de una moda reciente, porque ésta se fundamenta en una serie de principios alimenticios basados en la forma en la que se cree comían nuestros antepasados unos 3 millones de años atrás, es una interpretación moderna de estas pautas. Así pues, este enfoque nutricional consiste en la ingesta de alimentos enteros y naturales, como carnes magras, pescado, frutas, verduras, frutos secos y semillas,evitando los granos, las legumbres, los productos lácteos y los alimentos procesados.
Resultados visibles
En cuanto a la pérdida de grasa, esta dieta puede ser beneficiosa por varias razones:
La dieta paleolítica o dieta paleo está indicada en general para personas que buscan mejorar su salud a través de una alimentación más natural y menos procesada. Es, por tanto, un plan de alimentación muy beneficioso para quienes quieran evitar las enfermedades propias de la dieta moderna, tales como hipertensión u obesidad. No obstante, y tal y como indica el estudio llevado a cabo en 2015 por la revista Journal of Diabetes Research, hay una serie de grupos de población específicos para quienes esta dieta está especialmente recomendada, como son las personas que sufren diabetes, puesto que el consumo de alimentos integrales favorece el control del azúcar en la sangre, reduciendo la tensión arterial con diabetes tipo 2.
Asimismo, investigaciones recientes han señalado que la dieta paleolítica puede ayudar a controlar determinadas enfermedades autoinmunes como la psoriasis. Además, puede ser beneficiosa para personas que buscan perder peso, mejorar su digestión, controlar los niveles de azúcar en sangre y reducir la inflamación del cuerpo.
Otras dietas: