Cuántas veces nos podemos haber formulado esta pregunta, y no sólo por una posible falta de ideas a la hora de cocinar, sino porque podemos desconocer qué alimentación es buena y equilibrada para nosotros o nuestros seres queridos.
Si a esto le añadimos otros factores como exceso de peso, embarazo, la práctica de un deporte determinado, hijos que no ayudan a la hora de comer, una enfermedad, etc., las dudas pueden ser aún más grandes.
Hay personas que van al trabajo todos los días de mala gana, están los que lo hacen con una actitud neutra, y hay personas que van a trabajar realmente contentas.
De la misma forma, se puede seguir una dieta a regañadientes, o con alegría y motivación. Este factor es clave para conseguir resultados positivos y duraderos.
Gracias a mi formación en el ámbito de la psicología y coaching nutricional, una de mis especialidades es plantear cambios en tu alimentación y ayudarte a asumirlos como algo positivo, para que sean duraderos. Una vez que se establece una dinámica de éxitos y de autoconfianza, el resto es un camino a disfrutar.
Si estás pensando en empezar a cuidar tu alimentación, puedo ayudarte a definir unas metas asequibles y llevarlas a cabo sin pasar hambre ni malos ratos.
